Palabras de Susana Razzella
Querida Amiga, compañera la que siempre tenia cosas para enseñarnos....Maestra eterna....Aunque la vida nos separó, siempre estarás con nosotros.
Cuando un amigo se va.... quedan recuerdos vividos.
Los que trabajamos contigo, tuvimos la posibilidad de compartir tus grandes experiencias.
Durante el paso por las Instituciones, entregaste tu vida, con trabajo, dedicación, perseverancia, para enfrentar la labor diaria.
Siempre dispuesta a dar consejos, orientaciones, apoyo y comprensión. Una gran socia, que con mucho profesionalismo, enfrentaste tu trabajo, con entrega y coraje ante situaciones diversas, con tu formación especializada y experiencia adquirida, formaste dirigentes y estableciste los caminos a seguir.
Queremos manifestarte nuestro agradecimiento por tu compromiso, generosidad, humanidad y fraternidad en toda la tarea emprendida.
Amiga, colega y servidora, ¡ Siempre te recordaremos!
Hija y nieta de Elena, Juan Figuerdo y el marido de Elena , descubriendo la placa.
El Dr. Juan Figueredo recordando a "la gran" Elena
